¿Cómo te llevás con las sorpresas, con esos momentos, espacios o lugares de los que no tenés información o no esperabas encontrarte?
Hoy te quiero contar, cómo percibo que nos estamos perdiendo lo mágico del “efecto sorpresa” y voy a comenzar con una historia.
Mis hijas siempre me pedían que les regale las muñecas LOL, si tenés niñas sabrás de lo que te estoy hablando y sino te cuento que son una muñecas que vienen en una esfera sin saber cual te va a tocar.
No sé fuera de nuestro país, pero en Arg no era nada accesible adquirir este tipo de juguetes. La cuestión era que al recibirla, se les llenaba la cara de felicidad al desconocer qué muñeca les tocaría, pero luego era difícil que jugaran con ellas.
Y me costó comprar más de una muñeca para darme cuenta que lo que necesitaban era ese efecto sorpresa de no saber con qué te vas a encontrar.
Y eso es lo que te quiero traer hoy.
Ya no es sencillo que nos sorprendan, hasta para llamar a alguien por teléfono primero le consultamos si está disponible, o para ir a visitar a un/a amigo/a.
Si vas a conocer una nueva ciudad previamente investigás que lugares vas a visitar y planificás cada día con su destino.
No vamos a ver una película sin antes mirar el trailer.. y así puedo continuar…
Son pocos los momentos que generamos fuera de nuestro círculo de control.
Cuando saqué ATREVETE presencial, fue un gran desafío y sobre todo era entregar un espacio nuevo donde las personas no sabían que iban a hacer realmente.
Es difícil entregarnos a una experiencia que nos sorprenda, parece que ya todo tenemos que tener bajo nuestro control.
Acá va otra historia que me encanta contar. Y es que de adolescente, todo era incógnita cuando te gustaba un chico (en mi caso), no existían los celulares, y para contactarte le tenías que dar el teléfono fijo. Era una adrenalina por tus venas cada vez que sonaba y corrías para que no lo atendieran tus padres. O finalmente salir al boliche sin saber si te lo ibas a encontrar. Juntarte para conocerlo, porque no sabías nada de sus gustos o preferencias.
Eso ya es difícil que se genere, ahora los adolescentes saben por las redes, con quien se juntan, qué gustos tienen, adonde están, todo de manera on line.
Con esto quiero decir que busquemos nuevas formas de sorprender a quienes nos rodean o de sorprendernos, abracemos la incertidumbre y busquemos nuevas maneras de sentir o hacer sentir eso inesperado.
A veces es simplemente prepararle un café o un mate a tu compañero/a de trabajo sin que lo espere, o llamar por teléfono a esa persona que estás agradecido de tener en tu camino.
¿Se te ocurrió alguna? no dejes de llevarla a la acción y disfrutar de ese momento mágico.
Si querés compartimela en las redes.
Gracias por estar de ese lado. Espero haberte sacado una sonrisa e impulsarte hacia un nuevo atrévete!